Durante la conferencia de prensa “Diálogos por la Transformación”, realizada en Palacio de Gobierno, la mandataria estatal explicó que este ambicioso proyecto forma parte de una política pública de prevención profunda, que apuesta por la comunidad como motor del cambio y por la cultura, el deporte y la organización social como herramientas clave para construir paz.
“Con participación de la comunidad, con esta estrategia profunda y duradera de prevención, estamos convencidas y convencidos de que retomaremos la tranquilidad que las familias colimenses anhelamos. Este es un programa que me genera mucha esperanza y que atiende justo lo que la gente nos pedía en sus comunidades”, expresó la gobernadora.
Espacios vivos con participación ciudadana
Los Semilleros de Transformación son lugares donde, de manera regular, se desarrollan actividades deportivas, artísticas, culturales y sociales, tales como yoga, boxeo, voleibol, pintura, fotografía, teatro, entre muchas otras, a cargo de instructores e instructoras financiados por el Gobierno del Estado.
En cada uno de estos espacios se promueve la formación de comités ciudadanos o comunitarios, que asumen la corresponsabilidad de preservar el espacio, organizar actividades y fortalecer el arraigo comunitario. Se busca que estos sitios, que antes eran lugares abandonados o inseguros, se transformen en centros de encuentro, convivencia y formación colectiva.
Inversión, cobertura y visión comunitaria
La gobernadora informó que este programa implica una inversión anual de 13.7 millones de pesos, y que actualmente ya se han establecido 101 semilleros con actividades en una etapa piloto. La meta es llegar a 160 en el corto plazo y posteriormente a 248, con actividades permanentes y seguimiento comunitario.
Por su parte, la directora del Centro Estatal de Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia con Participación Ciudadana, Marisa Mesina Polanco, explicó que se trata de un modelo de intervención comunitaria integral, basado en diagnósticos territoriales, encuestas y talleres, que busca fomentar la inclusión, la autogestión y la apropiación de los espacios públicos.
“Buscamos impactar de manera directa a 14 mil 880 personas en estos 191 polígonos, a través de 744 actividades distribuidas en los 248 semilleros. Cada intervención contempla procesos diagnósticos, organización comunitaria y evaluación final”, detalló Mesina Polanco.
Además, informó que los recursos provienen del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP) 2025, y se utilizarán para cubrir honorarios de personal operativo y facilitadores, así como en la renovación de infraestructura, vehículos y suministros necesarios para las actividades.
Organización y estructura ciudadana
Una parte fundamental del modelo es el comité ciudadano por cada semillero, integrado por 15 personas con cargos definidos (presidencia, secretaría y vocalías), de los cuales ya se han conformado 161 comités comunitarios. Estas estructuras son responsables de velar por el correcto funcionamiento y continuidad de las actividades, bajo principios de voluntariado, compromiso social y liderazgo comunitario.
Con este programa, el Gobierno de Colima reafirma su compromiso con la prevención de la violencia desde las raíces, apostando por la reconstrucción social desde los barrios, colonias y comunidades, involucrando directamente a sus habitantes en la construcción colectiva de un entorno seguro, saludable y solidario.